Masaje Sonoro

El masaje sonoro es una terapia en la que se utiliza como herramienta el sonido, en especial el sonido de los cuencos tibetanos.

Los cuencos, como ya lo he publicado en otros artículos, poseen la cualidad de emitir sonidos armónicos; de ahora en más lo denominare como patrón armónico o clave armónica.

Este patrón armónico es el que hace que, al escuchar el sonido profundo y claro que emiten los cuencos, rápidamente nuestra mente y cuerpo entren en un estado de relajación. Esto se produce porque nuestras partículas que se encuentran vibrando, y la vibración no es mas que sonido y energía, al detectar la clave armónica con la que se organiza la materia y la energía del cosmos por resonancia copian el patrón natural y comienzan a vibrar en armonía.

Para realizar el masaje se trabaja con cuatro conceptos fundamentales que son: armonía, resonancia, sincronía e intención.

El masaje sonoro consiste en ir trabajando sobre el cuerpo de la persona en resonancia y en sincronía con él; para dirigir el sonido con la intención hacia la zona que necesite ser tratada. Esto quiere decir que el terapeuta tiene que mantenerse en estado meditativo y debe conocerse muy bien a sí mismo para que su mente no interfiera en la sesión. También tiene que estar atento a las reacciones que se producen en el paciente cada ves que emite el sonido.

Se mantiene un feedabak de comunicación constante entre la persona que esta recibiendo el sonido y el terapeuta. Es un intercambio continuo, de una acción (sonido) producida por el terapeuta va a surgir una reacción en la persona receptora del sonido; esta reacción se transforma automáticamente en una nueva acción que el terapeuta deberá interpretar intuitivamente para reaccionar y así generar una nueva acción.

La sesión se puede realizar apoyando los cuencos directamente sobre el cuerpo y transmitir la clave armónica sobre el cuerpo físico principalmente; lo que produce un muy agradable y relajante masaje en el cuerpo, al transmitirse directamente la vibración del sonido producido por el cuenco. O trabajar separado del cuerpo emitiendo los sonidos sobre el cuerpo energético.

Lo que se busca principalmente en la sesión es lograr liberar y armonizar los bloqueos energéticos que pueda tener la persona en cualquiera de sus cuerpos y transmitir el patrón de armonía.

El terapeuta esta todo el tiempo transmitiendo información a través del sonido. Y esta información al llegar a los distintos cuerpos del paciente va a ser procesada. Por esta razón es muy importante para el terapeuta estar muy atento a sí mismo para que no interfieran durante la sesión sus pensamientos y emociones y si es así saber cuando pertenecen a él; porque confundirían al terapeuta en su trabajo intuitivo, se mezclarían con la intención que se le esta dando al sonido y esto entraría dentro del campo energético y físico del paciente.